Durante una época, el cine español se fijó en historias callejeras, en la vida de arrabal y en una generación de jóvenes heridos por la droga, el tirón de bolso y la rebeldía sin causa. Sí, se trata de los quinquis, aquellos antihéroes que ladraban a la vida sin esperanza con un cuchillo entre los dientes y una lacerante juventud que hendía sus venas en la tragedia de la amapola.

Estas historias se han instalado, para siempre, en la memoria de una generación de espectadores y ahora vuelve como testimonio ineludible aquellos que quieran descubrir o regresar a una forma de hacer y entender el cine como no ha habido otra en España. Actores no profesionales, ex delincuentes, historias transgresoras... Con el cine quinqui no introducimos en un mundo apasionante, lleno de matices y de extrarradio palpitante. Y estos son los cinco personajes más icónicos que puedes conocer, o redescubrir, gracias a FlixOlé.

El Jaro

josé luis manzano
Flixolé

    La historia de José Luis Manzano recoge el espíritu de lo que es lo quinqui. Un muchacho sin oficio ni beneficio, envuelto en el paro de su tiempo y con el aura de la brevedad. Eloy de la Iglesia, maestro del género, persona contradictoria, se topó con su actor fetiche en la calle. Allí, en ese palco privilegiado a la vida, el director sin formación encontró al que sería su actor sin formación. Dos náufragos que se salvarían gracias a la vibrante autenticidad. Manzano, que no sabía apenas leer ni escribir, se prostituía para ganar dinero y fue así como conoció a De la Iglesia. Cuando quiso rodar Navajeros pensó en él como su protagonista.

    De ese encuentro marginal surgió un fenómeno que estallaría con El pico. José Luis Manzano y Eloy de la Iglesia se convirtieron en un máquina humana de generar éxitos en taquilla. Manzano, incluso, supo salir de sí mismo para interpretar el drama ambientado en el País Vasco. Lo sorprendente de este actor y personaje que es el epítome de este género fue su final, tan de sus personajes. La imagen destructora que él mismo mostraba de la heroína no lo salvó de morir a causa de ella en 1992, tras salir de la cárcel por asalto con intimidación.

    A pesar de todo, lo vamos a recordar como José Joaquín Sánchez Frutos, El Jaro, en Navajeros. La película que abre la puerta a un mundo que forma parte ya de nuestra historia cinematográfica. Un joven se escapa del reformatorio, roba para ganar dinero y una prostituta se enamora de él. Tirones, persecuciones, atracos, amor supurante. El gran inicio.

    El Vaquilla

    el vaquilla
    Flixolé

    Un mito de la sociedad española. De profesión marginado. Antológico es el arranque de la película de 1985 Yo, «El Vaquilla» en la cárcel: «Nací aquí, a este otro lado de la sociedad. Y nunca pude, o nunca quise, pasar al otro». Si la UVA de Vallecas no daba a la gloria tampoco lo haría el Campo de la Bota de Barcelona. Juan José Moreno Cuenca es el verdadero Vaquilla que entona esas frases tan impactantes, por verdaderas, de la película. Su intérprete, Raúl García Losada, nos muestra cómo la vida se precipita al delirio cuando su madre entra en prisión.

    El Vaquilla inspiró a delincuentes, a otros hermanos de la cofradía de la quincalla y a un conjunto de autores que han querido contar cómo es la vida de quien comete un asesinato con 12 años. José Antonio de la Loma, el director de la película, supo llevar lo impactante de todo esto con la profesionalidad que lo caracteriza. También podemos verlo en la secuela: Tres días de libertad.

    El Pirri

    pirri
    Flixolé

    Grandes personajes secundarios también hacen grandes películas. José Luis Fernández Eguina era como Manzano. Un niño nacido de las ausencias (de oportunidades, de padres, de educación...). Y como a aquél, también lo descubrió Eloy de la Iglesia, que lo incorporó para Navajeros, El Pico, El Pico 2 o La estanquera de Vallecas; participó a su vez en Maravillas, Sé infiel y no mires con quién. No sólo hizo cine quinqui, pero lo recordaremos principalmente por Maravillas, una película de Manuel Martínez Aragón que protagoniza junto con Fernando Fernán-Gómez.

    Maravillas (Cristina Marcos) es una chica de quince años cuyo padre (Fernán-Gómez) roba para hacer viajes eróticos. Ella, por suerte, cuenta con la ayuda de unos padrinos que la quieren y la protegen, pero se verá envuelta en un robo que apuntará a su padre como sospechoso de un asesinato. Merece la pena guardar silencio en todo lo demás para huir del spóiler. De nuevo, robos, asesinato, El Pirri y Fernando Fernán-Gómez. No necesitas más.

    Lamentablemente, El Pirri sucumbió al atraco, la cárcel y a la muerte prematura con una sobredosis a los 23 años.

    Ángela y Pablo (la pareja de Deprisa, deprisa)

    berta socuéllamos y josé antonio valdelomar
    Flixolé

    Nuestros Bonnie and Clyde. Integrantes de una banda de jóvenes a los que, como a los anteriores, les abandonó la vida demasiado pronto. Carlos Saura contrató a actores no profesionales para rodar otra cinta insoslayable del género. En ese casting se topó con Berta Socuéllamos (Ángela) y José Antonio Valdelomar (Pablo), dos chicos del madrileño Villaverde Alto.

    Ángela y Pablo, junto a sus amigos, empiezan una escalada de atracos mientras sufren lo anodino de un mundo que les ha dado la espalda y del que escapan con la heroína. Vivir deprisa, sentir al máximo y conseguir un dinero fácil que, al final, acaba pidiendo violencia. Saura consiguió lo que pretendía con este sólido filme que ganó el Oso de Oro de Berlín en 1981.

    El Lute

    imanol arias como el lute
    Flixolé

    Eleuterio Sánchez, El Lute, podría considerarse el primer antihéroe quinqui; un protoquinqui de los sesenta que recurriría al robo y a las fugas. El acontecimiento que desencadena la leyenda es de los más conocidos de la historia criminal de España: el robo que acaba con la muerte del vigilante de seguridad en una joyería de la calle madrileña de Bravo Murillo el 5 de mayo de 1965. También, la condena a muerte que se le impone en la penúltima década del franquismo.

    A partir de ahí, Imanol Arias da vida a este personaje en El Lute: Camina o revienta. La pena de muerte se le conmuta por cadena perpetua y, durante el traslado decide fugarse y debe huir de la Guardia Civil.

    Tenemos la suerte de contar con una segunda parte: El Lute II: mañana seré libre. En esta cinta, El Lute quiere vivir como los payos, tiene un estilo de vida en mente y no está dispuesto a que nada lo detenga tras fugarse de la cárcel del Puerto de Santa María.

    Todas las películas mencionadas se incluyen dentro del catálogo de más de 4.000 títulos que se pueden disfrutar en FlixOlé. Ahora puedes suscribirte por solo 3,99€ al mes. Además dispones de 14 días de prueba gratuita. Entra en flixole.com para obtener más información.